La escalera
En cuanto llegamos a la casa hace 3 años, en Mayo de 2008, la casa presentaba algunos desafíos.
Un tema a encarar eran las alfombras, todos los cuartos y el piso de arriba, incluyendo la escalera.
No es que se viera tan mal cuando llegamos salvo por la alfombra quemada.
Hace casi 2 años, la pintura de la escalera blanca pero de pared estaba que no daba para más con el manoseo y los pies (todas cosas razonables para una escalera) así que Marina se puso a despintarla. El trabajo resultó demasiado arduo. Las 5 capas de distintas pinturas (dos de pared, blanca y gris) varias de esmalte: verde, marrón y otro gris), eran mucho para cualquier método: Cepillo, removedor de pintura, pistola de calor... lo que removía una capa, era inocuo para la siguiente, así que la bendita escalera estuvo por mucho tiempo a medio despintar.
En febrero de este año pintamos el living y... si, las paredes alrededor de la escalera. Marina había sacado la bendita alfombra a un peldaño y la cosa no pintaba de maravillas, pero el peldaño de pino macizo parecía rescatable, así que para pintar sacamos la alfombra del resto. esto fue lo que encontramos:
Detalle de los escalones originales del descanso |
Irrecuperable. Entonces apareció en Sodimac algo impensado: Maderas nativas de Raulí y Roble en 2" de espesor a precio competitivo y con promoción del Santander para compras en cuotas sin interés... Listo, decidido, compramos 7 listones de 2"x5" y 4 de2"x6" todos de 2.4m de largo.
A partir de ese momento también armé la carpintería completando herramientas: cepillo eléctrico y nueva lijadora orbital (la vieja lijadora china palmó), prensas de 60cm y pié para taladro (para poder entarugar y unir bien derecho). El resto de las herramientas ya las teníamos...
Ojo detalle a la der. las prensas en un peldaño encolado |
Con los escalones fabricados y barnizados con Lasur, quedaba la estructura metálica. Como no podemos desarmar toda la escalera ya que el único escalador de verdad es Joaco y somos nosotros dos, los viejitos, los que dormimos arriba, lo hice por partes. Primero la mitad inferior, que es la más compleja: tiene descansos, requería romper paredes, más recovecos de metal y paredes ocultas... un laburo chino.
Pintado de estructura en blanco sobre la pared y en negro todo lo que va despegado |
Finalmente, me puse el disfraz de albañil/pintor, sacándome el de carpintero y logramos completar la primera parte de la faena.
Habrá más cuando complete los cinco escalones sencillo que quedan. No vayan a creer que es menos laburo... sacar los benditos escalones actuales requiere formón y martillo para despejar las tuercas con que están fijados, sacar por la fuerza los escalones, cortar los pernos, mucha amoladora... también para alisar las ménsulas y seguir con la pintura de herrería... ya llegarán fines de semana de laborterapia para seguir.
Detalle de fijación de los escalones antiguos |
Sección terminada completa |
Más cerca
Desde arriba mostrando lo que falta |
Acercamiento a los descansos |
4 comentarios:
Te felicito por una buena idea y una buena ejecución.
Gracias Thomas... hay varios fines de semana completos ahí! y un pedazo de dedo reclamado como tributo por la lijadora de banda también!
Parraud! Lo admiro! Yo no cambio ni una lamparita! Tengo que hacer unos arreglos en Timor y construir una especie de baulera... cuanto me cobras?
a ver... pasaje, salidas a bucear, pretame la camioneta para jeepearla un rato y el pancho y la coca... eso por la mano de obra! en timor la corriente es 220? para las tools vió?
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